Nuestra conexión a Internet ha cambiado mucho en los últimos años gracias al estándar GPON. Hace menos de una década, la tecnología xDSL (cable de cobre) predominaba como medio para conectarse a Internet y se iniciaban los primeros despliegues de fibra óptica. A día de hoy la fibra óptica FTTH da servicio a más de 13 millones de hogares en España, un país puntero en cuanto a cobertura y clientes de esta tecnología.
¿En qué consiste el estándar GPON?
GPON (Red Óptica Pasiva con capacidad de Gigabit) es un estándar técnico aprobado en las recomendaciones G.984.1, G.984.2, G.984.3, G.984.4 y G.984.5 por la ITU-I, un organismo que pertenece a la Unión Internacional de Telecomunicaciones. Además, GPON hace referencia a los equipos y arquitectura de red para conseguir velocidades superiores a 1 Gbit/s, por lo que los fabricantes de equipos deben seguir con las recomendaciones del estándar.
Arquitectura de red GPON
Las redes FTTH siguen el estándar GPON que se divide en tres elementos.
Central GPON
La cabecera GPON también conocida como OLT, es el componente que emite pulsos de luz con información a través de los cables de fibra óptica hasta el punto de conexión con el usuario final. Su función principal es controlar la información transmitida desde la oficina central a la red de distribución.
Red de distribución
Para conectar a los usuarios, es necesaria una red de distribución que está formada por dos componentes, el divisor óptico de primer y segundo nivel. El divisor óptico permite dividir la señal para poder implementar la arquitectura punto a multipunto.
La división máxima por fibra en el estándar GPON es 1:64, lo que significa que como máximo, una fibra puede alimentar a 64 UUII. Para cumplir con ello, las configuraciones posibles son 16×4, 8×8 y 4×16, siendo esta última la más usada por los operadores.
Con una configuración 4×16, la fibra se divide en 4 en el primer divisor y en 16 en el segundo, dando así servicio a 64 UUII con una sola fibra.
Como la información se transmite a través de un haz de luz, toda la red de distribución es pasiva, lo que significa que no necesita de alimentación eléctrica para funcionar, a diferencia del anticuado xDSL que sí usa corriente eléctrica.
Conexión del usuario
La división de la fibra llega desde el segundo divisor hasta la UI (Unidad Inmobiliaria) del cliente, donde se conecta a una ONT. Una vez conectada, el cliente ya tiene conexión a Internet.
Cada ONT tiene un número de serie propio que debe estar registrado en la OLT. De no ser así, la OLT no identifica la ONT y la conexión se bloquea.
Ventajas y aplicaciones
El estándar GPON permite multiplicar por 4 la distancia máxima de enlace respecto a la tecnología xDSL con enlaces entre OLT y ONT de hasta 20 Km. Además permite enlaces de mayor velocidad hasta alcanzar los 2,4 Gbps de bajada.
Al permitir mayores velocidades de tráfico de datos, GPON ha abierto un mundo de posibles aplicaciones:
- VoIP: Líneas de teléfono por Internet, que sustituyan al cable de cobre
- IPTV: Televisión por Internet
- Juegos Online
- Domótica
- Videovigilancia
- Plataformas de streaming: Netflix, Disney+, HBO…
El futuro de GPON
Actualmente la mayoría de operadores ofrecen velocidades de hasta 1 Gbps, aunque la media española se sitúa cerca de los 300 Mbps. En un futuro próximo, los operadores de telecomunicaciones podrán ofrecer velocidades de hasta 10 Gbps de bajada gracias a la evolución del GPON, el estándar XGPON.
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